El pitch o cómo vender una idea
¿Qué es un pitch?
Un pitch es una presentación en la que se resume una idea para un filme, libro, videojuego, serie o cualquier otra producción audiovisual, con el objetivo de obtener financiamiento u otro tipo de apoyo para llevar a cabo su producción. La duración de un pitch es variable, generalmente de unos 2 a 20 minutos.
Imaginemos, por ejemplo, que tenemos o estamos desarrollando un guion para un cortometraje. Luego, buscamos a posibles inversionistas que podrían interesarse en financiar nuestro proyecto. Conseguimos una reunión con estas personas y les comentamos por qué nuestra idea (guion) tiene el potencial de convertirse en un éxito (comercial y/o artístico). Cuando les contamos de qué se trata y cómo será el corto, estamos presentándoles un pitch.
Para realizar un pitch, es común que se utilicen medios visuales (un pitch deck) y se facilite un documento que contenga los elementos necesarios para dejar clara la idea de aquello que se desea producir (un lookbook).
Esto no significa que la presentación sea siempre rígida, con diapositivas y en una sala de conferencias. Alguien que sabe cómo hacer que otras personas visualicen su idea, tiene una mayor posibilidad de obtener inversión para su proyecto. Lo visual aquí se refiere más a la forma en que la persona interesada en producir un filme u otro producto presenta su idea, utilizando un lenguaje que deje imágenes claras en los y las inversionistas.
En este sentido, el objetivo del pitch para un proyecto audiovisual es igual al de un pitch de ventas. Ello acontece porque quienes financian un filme, lo producen o colaboran en su producción esperan obtener un retorno de su inversión.
Uno de los factores más importantes al presentar un pitch es que este esté cargado de emoción y mantenga un alto nivel de creatividad.
Tipos de pitch
No existen formulas exactas para definir cómo se debe hacer un pitch. Uno o más tipos de pitches, o una combinación de varios, pueden ser utilizados para un mismo proyecto. Entre los tipos más comunes están:
- Elevator pitch (pitch del ascensor o elevador): es un pitch super breve y sucinto en el que se presenta una sinopsis de la historia u obra. Como su nombre indica, es un tipo de pitch que se podría hacer en un elevador, en el lapso de tiempo que le toma viajar entre pisos.
- Pitch deck: es una presentación con ayuda de diapositivas que puede tomar entre 10 y 20 minutos. Este pitch funciona tanto para proyectos audiovisuales o multimedia como para vender un producto o servicio en general.
- Pitch de menos de dos minutos: es similar al elevator pitch, pero que puede incluir imágenes y otros medios audiovisuales. En muchos casos, este es la primera presentación que se hace ante potenciales inversionistas.
- Story pitch: es un pitch que desarrolla la historia de la obra un poco más a profundidad que otros tipos de pitches más cortos. Este tipo es muy utilizado para vender el guion de una película, serie u obra de teatro, con el fin de producirla. Su duración llega a los 15-20 minutos.
¿Quiénes buscan financiamiento para una producción audiovisual?
Básicamente, cualquier persona involucrada en el proceso creativo o comercial detrás de una obra puede buscar apoyo financiero o logístico para producirla: un director, una escritora, una productora, actores, un fotógrafo, un equipo de trabajo artístico, etc.
Elementos importantes del pitch para producir una obra audiovisual:
- Un resumen de la historia que se desea producir (o publicar), siendo que esta quede clara. Una sinopsis breve de la obra en cuestión es una buena herramienta, siempre que esté limitada a pocas líneas.
- Mencionar el género, la audiencia a la que va dirigida la obra y su mercado.
- Se introducen los personajes que forman parte de la historia.
- Se utilizan imágenes y otros medios audiovisuales, originales o de proyectos similares, para ilustrar la realidad narrativa de la obra.
- El arte conceptual, estilo visual y diseño.
- Se responde al por qué alguien querría ver, leer o interactuar con la obra/proyecto.
- Es bueno que se den ejemplos de producciones similares (esto genera confianza sobre su potencial éxito).
- Se señala aquello que hace único al proyecto.
- Proyección de posibles costos de producción (depende del tipo de proyecto).
- Deja claro de qué se trata el filme u obra.
- Además de la presentación, tener listo un paquete (digitalizado y/o impreso) con todos estos elementos (un lookbook).
Presentando un pitch: el lookbook y el pitch deck
El lookbook
El lookbook (catálogo, portafolio o album) es un documento compuesto por todos los elementos esenciales para vender una idea audiovisual y obtener financiamiento (señalados en el punto anterior). Este documento es una de las formas más simples y directas de señalar el tono estético y el estilo visual, de un proyecto.
La característica más importante de un lookbook radica en el uso de imágenes que ejemplifican cómo se verá el proyecto. Estas imágenes pueden ser fotografías, fotogramas de otras películas, escenarios, paletas de colores, tipo de iluminación, planos, arte conceptual, personajes, y cualquier elemento audiovisual.
El pitch deck
Una forma habitual de presentar un pitch es por medio de una presentación en la que se utilizan diapositivas (u otra herramienta audiovisual). Durante esta presentación las personas interesadas resumen los puntos esenciales de su proyecto, guion, película, obra, etc., a potenciales inversionistas.
La característica principal del pitch deck es la de ser una herramienta visual que ayuda a dejar clara la historia y llama la atención de potenciales inversionistas. Es por eso que debe ser emotivo, creativo, despertar el interés y evocar el tono narrativo de la obra.
Los principales elementos que conforman el pitch deck son:
El logline, una sinopsis breve, equipo de producción, audiencia meta, intenciones de quien produce/dirige/escribe, personajes, otras producciones similares, experiencia previa y potenciales ingresos económicos (dependiendo del estado de la producción y conocimiento del mercado), arte conceptual y diseño visual (lookbook).
Es bueno que cada uno de estos elementos esté dispuesto uno por diapositiva. La duración de la presentación puede llegar a los 20 minutos. Sin embargo, es recomendable que sea lo más breve y sucinta posible.