Gambito de Dama – Crítica
Gambito de Dama es una serie en la que Beth Harmon, una joven huérfana, entra en el competitivo mundo del ajedrez profesional, enfretándose a los estereotipos del tablero y sociales. A pesar de ser una joven prodigio, Beth debe superar sus propios demonios si desea triunfar sobre los grandes maestros del juego.
Sinopsis de Gambito de Dama (¡spoilers!)
La historia de Gambito de Dama comienza en la década de 1950, en Kentucky (Estados Unidos), con una pequeña Beth Harmon (Ana Taylor-Joy), quien sobrevive a un accidente automovilístico en el que fallece su madre. Beth es declarada huérfana y termina en un orfanato. Allí, Beth recibe pastillas tranquilizantes diariamente. Jolene (Moses Ingram), una compañera del orfanato, recomienda a Beth tomar las pastillas por la noche antes de dormir. Sin embargo, esta práctica despierta una adicción en la pequeña Beth.
Poco después, Beth aprende a jugar ajedrez con el Sr. Shaibel (Bill Camp), el conserje del orfanato. Cada noche, Beth toma las pastillas y visualiza las jugadas que va aprendiendo. Sin embargo, Beth causa un incidente por su adicción a los tranquilizantes y prohíben al Sr. Shaibel que siga jugando ajedrez con la pequeña.
Años más tarde, Ana Wheatley (Marielle Heller) y su marido adoptan a Beth, pero este último las abandona poco tiempo después. Beth vuelve a jugar ajedrez y se inscribe en competiciones regionales. Al principio, otros jugadores la subestiman por ser mujer, pero esto cambia cuando Beth los vence uno por uno. Viendo que Beth es capaz de ganar dinero con el ajedrez, su madre adoptiva se ofrece como su agente.
Durante estos años, Beth conoce a varios jugadores, quienes pasan de ser sus rivales a compañeros de entrenamiento y amigos. Su adicción a las pastillas y el alcohol también incrementa. En este momento aparece su gran rival, Vasily Borgov (Marcin Dorociński), un maestro del ajedrez soviético. Borgov vence a Beth en cada enfrentamiento, ya que ella no consigue controlar sus problemas personales y adicciones.
Con la ayuda de sus exrivales y el apoyo de Jolene, Beth entrena y se embarca en un viaje para derrotar sus adicciones, superar sus problemas personales y convertirse en la campeona mundial de ajedrez.
Lo bueno de Gambito de Dama
El trabajo del reparto
Cualquier persona que haya visto esta miniserie de Netflix puede reconocer que su aspecto más fuerte es el elenco. Anya Taylor-Joy como Beth Harmon es fantástica. Su interpretación está cargada de fuerza y sutileza en cada escena. A pesar de que Beth Harmon es primordialmente una persona introvertida y con un gran conflicto interno, Anya Taylor-Joy intimida a sus rivales, sin mostrarla como una víctima. Mención especial para la pequeña Isla Johnston por su excelente interpretación de la niña Beth Harmon.
El resto del reparto es sólido. A pesar de que esta es una historia centrada en el personaje de Beth Harmon, las demás actrices y actores actúan a un gran nivel. Entre las actrices más destacadas se encuentra Marielle Heller, quien construye un personaje trágico en Alma Wheatley con mucha gracia y profundidad. Además, Harry Melling, quien interpreta a Harry Beltik, también otorga a su personaje de un rango amplio de emociones. De hecho, el arco narrativo de Harry Beltik es, posiblemente, uno de los mejores de toda la serie, y Melling contribuye mucho con su trabajo.
La fotografía
Steven Meizler es el encargado de la fotografía en Gambito de Dama y no decepciona. Los encuadres de cada enfrentamiento son a la vez íntimos y contextuales. La audiencia pasa de mirar a los ojos a los personajes a quedar inmersa en el ambiente en el que se encuentran. El encuadre es dinámico, pasando de primeros planos a planos generales cortos.
La composición de las escenas es muy cuidada, manteniendo un balance que transmite la formalidad del propio juego de ajedrez. Esta simetría contrasta con el uso de colores y el diseño de la época (años 50 y 60), constituida por elementos muy vivos en el fondo de las tomas. De hecho, en muchas escenas los espacios, personajes y objetos del segundo plano se mantienen nítidos para que la audiencia se sienta parte de la acción.
En términos generales, Gambito de Dama cuenta con una composición simétrica, con líneas dentro del encuadre bien definidas, pero con elementos dinámicos situados a lo largo de cada toma.
Steven Meizler ya fue nominado a un Emmy por Godless, otra gran miniserie de Netflix (totalmente recomendada).
Acercar un juego tan complejo como el ajedrez a la audiencia
Uno los regalos de Gambito de Dama es su capacidad de aproximar a la audiencia a la batalla mental del ajedrez, de forma que esta se identifique con el juego, sin confundirla en el intento. Este debe ser el logro más grande de esta producción.
Es difícil utilizar como vehículo principal de una trama un juego tan complejo y traducirlo en algo que el público pueda disfrutar. Algo para anotar en más series y películas que tratan sobre actividades complejas (por ejemplo, en películas sobre póquer).
El diseño de producción
Al lado de la fotografía, el diseño de producción crea un mundo con una personalidad dinámica. Gambito de Dama es una miniserie ambientada en los Estados Unidos de los años 50 y 60. Las habitaciones, locaciones, salones, vestimenta, objetos y detalles transportan al público a un momento en el tiempo muy diferente del actual.
Por ejemplo, aun si cada habitación de la casa de Alma Wheatley posee un esquema de color y texturas muy variado, el estilo se mantiene constante. Uli Hanisch, quien estuvo a cargo del diseño de producción de la serie, estudió los patrones de la época y los incorporó como parte de la identidad de los personajes. Según Hanisch, varios de los excesos en la decoración de ciertos lugares refleja los gustos de los personajes y no necesariamente un trabajo de perfección en el diseño.
Es decir, la personalidad de la época y de los personajes vive en cada pieza escénica. Este esfuerzo en los detalles captura la atención y alimenta la imaginación del público sobre el mundo creado.
Lo no tan bueno de Gambito de Dama
Gambito de Dama es una gran producción sin duda alguna. Sin embargo, la serie tiene algunos problemas en cuanto a la justificación de ciertas acciones de los personajes.
La personalidad del personaje principal se contradice constantemente
A pesar de la gran actuación de Anya Taylor-Joy, el personaje de Beth Harmon presenta algunas contradicciones en su personalidad sin razón aparente. Desde el principio de la serie, vemos a una Beth introvertida y que guarda cierto distanciamiento emocional con otros personajes. Sin embargo, el personaje salta de la introversión y apatía, a ser sociable y extrovertida, de una escena a la siguiente. En muchos casos, el cambio de personalidad de Beth no tiene conexión con el momento en el que se encuentra la historia.
La relación entre los personajes secundarios y Beth es problemática
Relacionado con lo anterior, no se justifica el porqué otros personajes tienen algún interés en Beth a nivel personal, más allá del ajedrez. De hecho, la mayor parte del tiempo interactúa nuevamente con un personaje solo cuando hay algo que necesita o le ofrecen ayuda.
Por ejemplo, luego de marcharse del orfanato, Beth nunca intenta contactar de nuevo al Sr. Shaibel, sino hasta que necesita dinero para participar en un torneo de ajedrez. El Sr. Shaibel le presta el dinero, pero Beth olvida pagarle de vuelta y no vuelve a comunicarse más con él.
Algo similar ocurre con su amiga de la infancia y compañera del orfanato, Jolene. Una vez que adoptan a Beth, esta se olvida de Jolene por completo. Más tarde, Jolene es quien va a visitarla y, a pesar de que Beth no mostró interés en saber de su vida, le presta dinero para participar en un torneo.
Lo mismo se puede decir, en mayor o menor medida, de su relación con otros personajes. A la chica que le muestra apoyo durante su primer torneo, Beth la trata de forma fría más tarde en la serie. Igual sucede con Harry, cuando este le aconseja tratar su problema de adicción. La única excepción al mal trato o apatía de Beth es su madre adoptiva y un personaje por el que siente atracción.
Todo esto lleva a la pregunta: ¿por qué los personajes se sienten tan interesados en Beth? Ella no muestra empatía o interés recíproco por la mayoría de estas personas. Podrán enfermar, casarse, mudar de carrera o desaparecer, nada de lo que les ocurra es de importancia para Beth.
La profundidad interior de los personajes secundarios
Beth, Harry y Alma Wheatley son los únicos personajes que tienen alguna forma de arco narrativo. Es decir, su historia personal comienza en un lugar y termina en otro distinto. Su desarrollo es observable y se conoce algo sobre ellos. Fuera de estos tres personajes, el resto del elenco está ahí solo en función del personaje principal.
Por supuesto que no es posible explorar a todos los personajes, pero estos están allí solo para salvar al personaje principal. El Sr. Sheibel esta ahí para que Beth aprenda a jugar ajedrez y luego queda en el abandono. Jolene tiene algunas escenas interesantes, pero su historia es totalmente ignorada, salvo una conversación que mantiene con Beth. Su personaje gana relevancia solo cuando es necesaria para salvar a la protagonista. El resto de personajes solo está ahí para empujar a Beth a través de la historia.
La adicción es tratada de forma ligera
Quizás el mayor problema narrativo sea el trato que se hace de la adicción a las pastillas y alcohol. Es una forma de mostrar explícitamente que el personaje de Beth Harmon tiene un conflicto, pero todo queda en la superficie. Los efectos, físicos y mentales de las drogas son inexistentes (más allá de que afectaran su juego).
Beth se recupera de una vida de adicción a los tranquilizantes que ha tenido desde la niñez y del alcoholismo que inició desde que era una adolescente, sin problema alguno. Las personas con este tipo de adicciones pasan por períodos muy duros para tratar de recuperarse.
En Gambito de Dama, los efectos y consecuencias de estas drogas nunca se hacen visibles. Nuestra heroína descansa un par de noches y termina fresca como una lechuga. Un día, Beth decide que ya no hay más adicción y, como por arte de magia, esta desaparece. Si esta situación era tan fácil de resolver, entonces nunca fue un verdadero problema para el personaje.
Conclusión
Gambito de Dama merece todo el seguimiento que se le da. Es una producción visualmente agradable, con una actuaciones convincentes. Anya Taylor-Joy tiene un gran futuro (y presente) como actriz y trata a su personaje con total seriedad. Quizás lo malo de la serie sea la poca empatía que Beth tiene con los otros personajes, cuyas historias parecen no importarle mucho. La representación de la adicción también deja algo que desear, ya que pudo jugar un rol más importante, en cuanto el conflicto del personaje y su resolución. En todo caso, es una serie que toma riesgos, con gran producción y es bastante entretenida.
Ficha Ténica de Gambito de Dama
Año: 2020
Distribución: Netflix
Creada por: Scott Frank, Allan Scott
Dirección: Scott Frank
Guion: Scott Frank
Producción: Marcus Loges, Mick Aniceto
Fotografía: Steven Meizler
Elenco Principal: Anya Taylor-Joy, Moses Ingram, Marielle Heller, Isla Johnston, Jacob Fortune-Lloyd, Bill Camp, Thomas Brodie-Sangster, Marcin Dorociński, Harry Melling
Tráiler de Gambido de Dama
Calificación: 7.5/10
